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Publicar nuestros textos también supone exponerlos a la luz pública y, por tanto, formarán parte del mundo literario. Así, las ideas expresadas en nuestros textos fluirán entre lectores y escritores, y es posible que puedan germinar en otras obras.
La frontera entre la inspiración y el plagio es, a menudo, delicada y estrecha. En ocasiones, podemos nutrirnos de alguna idea sin necesidad de incurrir en copiar directamente otro texto. Esto se hace más notable desde la postmodernidad con la incursión en los discursos literarios de elementos como la intertextualidad, que en muchos casos borra o diluye las fronteras entre las obras.
No obstante, es interesante saber que existen herramientas que podrán ayudarnos a comprobar si se ha producido un plagio textual sobre parte de nuestra obra.
Plagiarisma
Es, sin duda, el servicio más conocido y utilizado habitualmente. Permite realizar una búsqueda exhaustiva en toda la red buscando coincidencias en cadenas textuales (frases y párrafos). Plagiarisma permite introducir el texto a comprobar de 3 formas distintas:
- Campo de búsqueda: podremos pegar el texto a comprobar dentro de un campo de búsquedas, seleccionado el buscador que queremos utilizar (Google o Bing) e indicando si queremos que la búsqueda sea exacta, es decir, que busque exactamente las oraciones tal y como las hemos introducido.
- URL o dirección de internet: el sistema comprobará el contenido tomándolo de la dirección de internet que especifiquemos.
- Subida de archivo: por último, podremos subir el texto en cualquier de los siguientes formatos: TXT, HTML, RTF, MS WORD DOC, DOCX, PPTX, XLSX, XLS, PDF, ODT, EPUB, FB2.
Quetext
Quetext realiza una búsqueda online del posible contenido duplicado con un estilo minimalista y sencillo. Solo tendremos que pegar el texto a analizar y el sistema nos indicará los posibles sitios web donde localiza ese mismo texto.
Si Quetext identifica alguna página en la que detecte dicho contenido, nos ofrecerá además la oportunidad de citarlo con una sencilla app, en el caso de que descubramos que nuestro contenido estuviera previamente desarrollado o quisiéramos encontrar la fuente de un determinado contenido.
Otros recursos gratuitos
Existen más herramientas que nos permitirán analizar la red en la búsqueda de posibles plagios, si bien los dos servicios anteriores son los más completos y funcionales.
- Plagiarism Checker: https://smallseotools.com/plagiarism-checker/
- Bibme: https://www.bibme.org/grammar-and-plagiarism/
- Edubirdie: https://edubirdie.com/plagiarism-checker
Por último, no podemos dejar de mencionar el propio buscador de Google; si bien es útil para textos con una extensión más reducida. Si introducimos en el campo de búsqueda cualquier frase entre comillas («mi frase»), Google nos devolverá los posibles sitios web que contengan dicha oración tal cual la hemos introducido.