Lo más importante a la hora de escribir un libro de relatos, es ser creativo, dominar las principales técnicas narrativas y tener una buena idea. A simple vista puede parecer una tarea sencilla, pero se necesita saber jugar con las palabras, tener un final que no deje a los lectores indiferentes, que sea capaz de sorprender y no sea demasiado extenso.
Si llevabas tiempo pensando en escribir tus propios microrrelatos, te ofrecemos algunos consejos que pueden ayudarte a sacar lo mejor de ti.
9 consejos para escribir un microrrelato
1. Significado oculto
Una de las mejores opciones es que el relato en sí tenga una metáfora o significado que esté oculto y necesite la comprensión de los lectores, algo como una idea no revelada. El poder de estas historias es ofrecer un contraste entre:
- Un hecho que aparentemente sea insignificante.
- El verdadero sentido de la acción y su influencia en la trama.
2. Brevedad
Estos textos narrativos se caracterizan por ser muy breves, por lo que el interés del lector debe destacar desde la primera línea. No hay tiempo para descripciones, céntrate directamente en la acción.
3. Crear contenido original
La ventaja de contar únicamente aquello que es esencial es que el lector puede meterse fácilmente en ese mundo e imaginar qué es lo que está pasando. Un ejemplo de contenido original es:
«Cuando despertó, la sombra aún estaba ahí, mirándole fijamente a los ojos».
De esta forma, se otorga una sensación incómoda al lector, al meterse en la piel del protagonista, pero anima a continuar leyendo para saber qué ocurre después.
4. Imaginación
No pongas límite a tu imaginación, cualquier tema que te guste tiene cabida en este tipo de historias, lo importante es la argumentación, la acción y que no aburra a los lectores.
5. Principio
Para ubicar correctamente a los lectores, el principio debe de estar bien estructurado, aunque lo más importante es la parte final, debe ser sorprendente. Antes de empezar a escribir un microrrelato, intenta dar vida a la primera parte y al final, así, será más fácil desarrollar el contenido.
6. Medios
Debes tener una buena economía de medios:
- Nunca incluir a más de tres personajes, ya que la extensión el relato podría ser excesiva.
- Limitar la historia a uno o dos lugares.
- El tiempo transcurrido debe ser muy breve.
7. Síntesis
Cuando tengas pensada una historia, apúntala en un papel, con todos los detalles que necesites para, posteriormente, reducirla sin que pierda el interés y, si es posible, que este aumente. Para ello, puedes servirte de palabras que despierten la imaginación de los lectores. A todo el mundo le gusta pensar qué es lo que en realidad quieres decir.
8. Título
Para la mayoría de microrrelatos, el título es la clave, llegando a completar la historia. Se trata de la primera toma de contacto entre tu imaginación y el lector. Que apetezca leerlo depende en gran parte del título.
9. Giro final
Ya sea un final abierto o uno donde todo se resuelve, en lo único que tienes que pensar es en algo inesperado, que a los lectores les sorprenda, les haga reír e incluso les dé escalofríos, dependiendo de la temática por la que te hayas decantado.