Ser escritor es uno de los grandes sueños de aquellos que tienen la imaginación y la creatividad por bandera. Dejar plasmados todos esos sueños, mundos de fantasía o incluso las memorias, es uno de los grandes retos de cualquiera que quiera eternizarse más allá de la propia vida. Sin embargo, y aunque a priori pueda parecer un trabajo sencillo, saber escribir no significa ser escritor y mucho menos un gran escritor.
Si tienes algunas ideas en mente y has pensado en publicar un libro es importante que tengas en cuenta algunos pequeños consejos que pueden servirte de ayuda, especialmente si quieres que todo tu talento llegue al lector con total claridad y nitidez. Y ahí es donde llega una norma estricta que debemos seguir: la ortografía.
¿Por qué es tan importante la ortografía?
Conocer un idioma y saber hablarlo con fluidez no significa que sepamos llevarlo a la escritura con la misma exactitud. Según para qué tareas de nuestro día a día, no será necesario, aunque deseable, tener una ortografía perfecta, pero si queremos ser escritores, entonces resulta fundamental.
No debemos olvidar que el escritor cuenta con una única herramienta: el lenguaje, y conocerla es el primer paso para hacerse entender y transmitir todo aquello que se desea. Un escrito con faltas de ortografía tanto en sus letras, como en sus signos de puntuación o acentuación, solo consiguen crear un texto ilegible, que no despertará ningún interés en el lector y que, por lo tanto, acabará abandonando.
Así pues, si ya te has decidido a publicar tu libro, el primer consejo es que repases muy bien toda su ortografía antes de ponerle alas y echarlo a volar. Estas normas básicas te pueden venir muy bien.
Normas básicas de ortografía para un libro perfecto
1. Las grafías
Uno de los mayores problemas aparece en las grafías de ciertas letras, así que vamos a refrescar las normas para evitar errores:
- La B. Se usa siempre B si va seguida por una consonante (Cable, cabrero, cobrizo, bruñido).
- La C. Generalmente se escriben las terminadas en “ción”, aunque con alguna excepción.
- Las G y J. La J se utiliza para las terminaciones “aje” o “eje” (equipaje, hereje). Y la G para verbos que acaban en “ger” y “gir”, excepto tejer o crujir.
- La H. Las que se componen del término “hum” (humedad). La A se escribe con H cuando el sujeto de la oración se puede cambiar de singular a plural (Pedro ha tomado té / Pedro y María han tomado té).
- La N y M. Antes de B o P siempre va M (empatar). Sin embargo utilizamos N cuando la letra siguiente es V (envidia).
- La S. La terminación “sión” siempre va con S, si la palabra contiene S (preso-prisión / expulsar-expulsión)
2. El uso de las tildes
Es necesario recordar que las palabras se dividen en llanas, agudas, esdrújulas y sobreesdrújulas, y la tilde será determinante para entender el significado de lo que queremos expresar. Fíjate en la siguiente frase, hablamos de la misma palabra pero con significados distintos dependiendo del acento.
“Yo ejercito mis músculos en el ejército porque el capitán los ejercitó antes.”
3. Los signos de puntuación
Para que el lector comprenda perfectamente el mensaje, es fundamental el uso de los signos de puntuación, de este modo no daremos pie a equívocos. Ya conocemos esa famosa frase de: “¡No tenga clemencia” a “¡No, tenga clemencia!”. Una vida entera por una coma.
Los más usados son los puntos, punto y coma, dos puntos y los signos de exclamación e interrogación. Sin embargo uno de los peor usados son los puntos suspensivos. Solo son 3, aunque algunos se empeñen en hacerlos infinitos. Y sirven para expresar misterio o duda, hacer una enumeración incompleta o dejar un final abierto.
Los errores más comunes
Si o Sí
–El si no se tilda cuando es un condicional: “Iré al mercado si tengo tiempo”.
–El sí se tilda cuando es una afirmación: “Sí que iré a la playa esta tarde”.
Porque, por qué y porqué
–Porque es una conjunción que indica causalidad: “Me gusta ir al parque porque veo a mis amigos”.
–Por qué se utiliza en oraciones interrogativas: “¿Por qué has venido”
–Porqué hace las funciones de un sustantivo en la oración: “Mi enfado tiene un porqué”.
A ver o Haber
–A ver está compuesta por la preposición A y el infinitivo del verbo VER por lo tanto su significado es la curiosidad que sentimos por ver o verificar un hecho: “A ver si mañana recibo su llamada”.
–Haber es el infinitivo del verbo HABER y se puede utilizar como verbo conjugado o como sustantivo utilizando el participio del verbo: “Debe haber llegado tarde. No ha hecho los deberes”.
Hay, ay o ahí
–Hay es una forma impersonal del verbo HABER: “En este colegio hay muchos columpios”.
–Ay es una interjección que expresa emociones y normalmente va entre signos de exclamación: “¡Ay qué dolor tan grande!”
–Ahí es un adverbio de lugar: “He dejado las zapatillas ahí”.
Ya ves que, con un poco de práctica y la mínima atención, puedes conseguir tener una ortografía perfecta, porque no solo de imaginación se llenan las grandes obras de literatura. Así podrás decir, con todo orgullo: “voy a autopublicar mi libro y mi sueño se va a hacer realidad”. Tú lo escribes y en ediciones ende te ayudamos a editarlo. Estás más cerca de conseguirlo de lo que piensas, solícita un presupuesto online gratuito, y da el primer paso hoy mismo.